viernes, enero 25, 2008


LA MUERTE DE UN HIJO
Y SU IMPACTO EN LA PAREJA


La muerte de un hijo o una hija es una de las experiencias más duras, difíciles y dolorosas que puede sufrir un ser humano.

Los padres se sienten responsables de la protección de sus hijos y, su pérdida, suele ser vivida como un fracaso y con una gran culpabilidad.

Es frecuente que la muerte de un hijo produzca tensiones y conflictos en la vida de pareja:

Dificultades para aceptar que la pareja viva la pérdida a su manera. Un miembro de la pareja puede sentir, por ejemplo, que al otro no le importa la muerte lo suficiente (quizás porque no llora o porque no quiere hablar del fallecido). A veces, la necesidad de parecer fuerte, puede interpretarse por el otro como falta de interés.

Culpar a la pareja. Es frecuente que uno de los miembros de la pareja piense que el otro es de alguna manera responsable de la muerte. Esto se puede traducir en reproches continuos o en sentimientos de impaciencia e irritabilidad hacia el otro.

Falta de sincronicidad. Puede ocurrir que la pareja no viva al mismo tiempo los momentos de mayor dolor o las recaídas. Esto puede crear la sensación de que uno siempre está inmerso en el dolor, y puede contribuir a que se eviten el uno al otro en los momentos difíciles, para no recaer en el sufrimiento.

Las relaciones sexuales. En las relaciones sexuales, puede ocurrir que las necesidades de uno incluso aumenten, mientras que las del otro disminuyan o desaparezcan. Esto puede ser fuente importante de conflictos. El hombre, en general, tiene una sexualidad más genital, y es capaz de separar el deseo sexual de su situación emotiva. La mujer puede sentirse incapaz de desear si está triste o enfadada.
Es perfectamente natural querer disfrutar de vez en cuando del sexo y otros placeres, los momentos de dolor ya vendrán por si sólos.

Algunas sugerencias: Convéncete que te resultará muy difícil sobrellevar esta situación solo. No pretendas tampoco que tu pareja se convierta en tu principal soporte afectivo, bastante tendrá muchas veces con lo suyo... Busca pues una, dos o más personas de confianza con quien compartir tu dolor. Procura mantenerte lo más unido posible a tu pareja, apoyaros mutuamente, respetar el ritmo y la manera de llevar el duelo del otro. Puede ser que estés pasando, por ejemplo, por una etapa en la que prefieres estar solo o con los mas cercanos, y que evites a la gente para no tener que hablar de tu hijo, y en cambio, a tu pareja, le esté ayudando exactamente todo lo contrario. ¿Cómo conciliar las necesidades de ambos si la pareja está acostumbrada a hacerlo todo juntos, por ejemplo? Es necesario paciencia, comprensión y creatividad para introducir cambios en nuestra forma de vivir que nos permita seguir adelante sin añadir más dolor al dolor.

Los otros hermanos. La pareja puede estar tan afectada por su propio dolor, que descuide a los otros hermanos. Ellos también sufren intensamente la pérdida, se sienten culpables y pueden tener necesidad de desahogarse. Hablar del fallecido y compartir, cada uno a su estilo, el dolor por la pérdida, puede ser la mejor manera de ayudarse unos a otros y afrontar sanamente la experiencia de duelo.


IMPORTANTE: SI VEIS QUE OS ESTÁIS ALEJANDO EL UNO DEL OTRO Y QUE VUESTRA RELACIÓN SE DETERIORA DÍA A DÍA, NO DUDÉIS EN PEDIR AYUDA A UN PROFESIONAL QUE OS ASESORE Y OS AYUDE A ENFRENTAR LAS DIFICULTADES.

Para más información sobre el impacto de la muerte de un hijo en la pareja recomiendo la lectura del siguiente escrito de Carlos Juan Bianchi:
Incidencia de la pérdida de hijos en la relación de pareja

Puedes encontrar el testimonio de padres que han perdido un hijo en el
libro de relatos
o el foro de ayuda mutua de Vivir la pérdida.


Bueno aquí un folleto en donde se explica las consecuencias que puede traer el duelo en la pareja. Me hubiese gustado haber tenido esta información hace un tiempo atrás.

El haber creado esta entrada es para que a los lectores que se encuentran en una situación como esta lo tengan presente para poder proteger a su familia, con mi esposo vivimos todo esto, nuestro duelo fue en soledad, cada uno sufriendo por su lado para tratar de no hacer sufrir al otro… no tuvimos mucho apoyo, solo los dos tratando de buscar una salida a tanto dolor… culpándonos en silencio en uno al otro... es aquí donde buscamos ayuda equivocada sobre todo mi esposo, la cual nos llevo a tener una crisis que casi termina con nuestra familia, pero nuestro amor fue más fuerte y solo estuvimos un mes separados,( de no haber sido por la perdida de mi hija, sé que no habría ocurrido nunca lo que paso) esto nos llevo a darnos cuenta de que teníamos una familia que debíamos sacar adelante y teníamos que hacerlo juntos… a mi en lo personal hizo recordar lo tanto amaba a mi esposo, y decir vasta a mi dolor, tengo una familia por la cual jugármela, sufrir por mi hija de una manera distinta con optimismo para los que estábamos vivos. Orgullosa y satisfecha por haber echo todo lo que hice por mi esposo y mis hijos. Los amo demasiado a ti también mi Conita, mi loquita, si en algún lugar viste todo lo que paso después de tu partida… siéntase orgullosa de que tiene una familia que la ama, unos papás que la adoran, te llevaste gran parte de nosotros contigo y dejaste un vacío muy grande en nuestra familia,

pero así y todo salimos adelante y míranos ahora y ve todo lo que hemos logrado en tu nombre te amooo, ahora con lágrimas en mis ojos te digo mi amor que te amo… ¡te tuve que dejar partir!